PRONUNCIAMIENTO DE LA CONFLUENCIA DE MUJERES AL CONGRESO DE TIERRAS, TERRITORIOS Y SOBERANÍA
Preguntarse por las mujeres y el territorio, la tierra y la soberanía implica necesariamente evaluar las condiciones como nosotras hemos transitado en estas. El patriarcado, como sistema de opresión de la humanidad materializado principalmente en la vida de las mujeres, ha implicado para nosotras en estos tres aspectos muchas formas opresivas entre las cuales identificamos:
· La expropiación a las mujeres de la soberanía sobre sus cuerpos manifestada en la cosificación del cuerpo de las mujeres al servicio del mercado y del fortalecimiento a las instituciones familiares y morales dominantes.
· Desconocimiento al valor económico de las labores desempeñadas históricamente por las mujeres en las comunidades como la labor del cuidado y el trabajo doméstico.
· Invisibilización de la labor de construcción del tejido social adelantada por las mujeres en los territorios como consecuencia de ser quienes permanecen mayor tiempo en ocupación y habitación de los mismos.
· Son las mujeres el 78% de las personas desplazadas en Colombia, quienes además en su mayoría, cuentan con niñas y niños a cargo cuando abandonan forzadamente sus territorios.
· Imposibilidad de acceso a la propiedad de la tierra como consecuencia de la subvaloración del trabajo campesino de las mujeres, donde a pesar de ser ellas quienes adelantan labores rurales durante la mayoría del tiempo de sus vidas, la titulación sigue estando exclusivamente en cabeza de los padres, esposos, patrones y otros.
· Apropiación de las mujeres al servicio de la militarización de la vida, manifestada en atenciones sexuales y domésticas obligadas para con los ocupadores militares de los territorios.
· No inclusión de los saberes de las mujeres sobre el cuidado de los territorios y el ambiente en las agendas programáticas del Estado y las comunidades.
En este contexto de expropiación y desconocimiento de nosotras, las mujeres hemos juntando voluntades y sueños, hemos Caminado la palabra, tejiendo las ideas y propuestas, hemosdesarrolla acciones de resistencia social, cultural y política aportando en la construcción de nuestras ciudades, de nuestras regiones. Desde nuestras visiones e intereses, pero también aunando nuestras luchas a los sectores populares igualmente excluidos de los escenarios de vida digna.
En tal sentido el Congreso de los pueblos es para las mujeres de la Confluencia un espacio de participación y unidad en el cual podemos y debemos ir aportando en la construcción de una propuesta de país, un mandato de mandatos, que cuente con la participación y reivindicaciones de todas las formas de expresión del movimiento social, y que reconozca y ataque los diferentes grados de opresión que sufre la clase desposeída en Colombia por su condición de sexo, raza, orientación sexual y etnia.
A esta apuesta conjunta las integrantes de la Confluencia de Mujeres por la Acción Pulbica, en el marco del Congreso de los Pueblos, tierra, territorio y soberanía le apuesta a:
· Acceso real a la propiedad de la tierra para las mujeres y las comunidades.
· Reconocimiento al valor del trabajo de las mujeres en el cuidado, en lo doméstico y en la construcción del tejido social y redistribución de las cargas de este trabajo como herramienta de mayor valor para la resistencia, existencia y arraigo de las comunidades en los territorios.
· Promoción de la participación de las mujeres en la construcción de propuesta para el cambio en los territorios, haciendo valer su palabra y recogiendo en los escenarios políticos sus consideraciones, saberes y apuestas.
· Recuperar desde y para las mujeres la decisión sobre sus cuerpos y vidas, rechazando la militarización de los territorios y negándonos como pueblo a entregar la soberanía sobre los cuerpos de las mujeres al servicio sexual y doméstico de las fuerzas militares.
· La construcción conjunta con otras expresiones del movimiento social de una agenda programática y de mandatos que impliquen al pueblo Colombiano y a la pacha mama ser soberanos sobre la tierra y el territorio de nuestro país.
Es por esto que nosotras, la Confluencia de mujeres participamos y construimos desde y para el Congreso de los Pueblos, tierra, territorios y soberanía, con el propósito de fortalecer la propuesta de construcción de un nuevo país para todas y todos. Porque sabemos que sin nosotras no es posible.
Confluencia de Mujeres Para La Acción Pública.
Bogotá, 29 de septiembre de 2011
Preguntarse por las mujeres y el territorio, la tierra y la soberanía implica necesariamente evaluar las condiciones como nosotras hemos transitado en estas. El patriarcado, como sistema de opresión de la humanidad materializado principalmente en la vida de las mujeres, ha implicado para nosotras en estos tres aspectos muchas formas opresivas entre las cuales identificamos:
· La expropiación a las mujeres de la soberanía sobre sus cuerpos manifestada en la cosificación del cuerpo de las mujeres al servicio del mercado y del fortalecimiento a las instituciones familiares y morales dominantes.
· Desconocimiento al valor económico de las labores desempeñadas históricamente por las mujeres en las comunidades como la labor del cuidado y el trabajo doméstico.
· Invisibilización de la labor de construcción del tejido social adelantada por las mujeres en los territorios como consecuencia de ser quienes permanecen mayor tiempo en ocupación y habitación de los mismos.
· Son las mujeres el 78% de las personas desplazadas en Colombia, quienes además en su mayoría, cuentan con niñas y niños a cargo cuando abandonan forzadamente sus territorios.
· Imposibilidad de acceso a la propiedad de la tierra como consecuencia de la subvaloración del trabajo campesino de las mujeres, donde a pesar de ser ellas quienes adelantan labores rurales durante la mayoría del tiempo de sus vidas, la titulación sigue estando exclusivamente en cabeza de los padres, esposos, patrones y otros.
· Apropiación de las mujeres al servicio de la militarización de la vida, manifestada en atenciones sexuales y domésticas obligadas para con los ocupadores militares de los territorios.
· No inclusión de los saberes de las mujeres sobre el cuidado de los territorios y el ambiente en las agendas programáticas del Estado y las comunidades.
En este contexto de expropiación y desconocimiento de nosotras, las mujeres hemos juntando voluntades y sueños, hemos Caminado la palabra, tejiendo las ideas y propuestas, hemosdesarrolla acciones de resistencia social, cultural y política aportando en la construcción de nuestras ciudades, de nuestras regiones. Desde nuestras visiones e intereses, pero también aunando nuestras luchas a los sectores populares igualmente excluidos de los escenarios de vida digna.
En tal sentido el Congreso de los pueblos es para las mujeres de la Confluencia un espacio de participación y unidad en el cual podemos y debemos ir aportando en la construcción de una propuesta de país, un mandato de mandatos, que cuente con la participación y reivindicaciones de todas las formas de expresión del movimiento social, y que reconozca y ataque los diferentes grados de opresión que sufre la clase desposeída en Colombia por su condición de sexo, raza, orientación sexual y etnia.
A esta apuesta conjunta las integrantes de la Confluencia de Mujeres por la Acción Pulbica, en el marco del Congreso de los Pueblos, tierra, territorio y soberanía le apuesta a:
· Acceso real a la propiedad de la tierra para las mujeres y las comunidades.
· Reconocimiento al valor del trabajo de las mujeres en el cuidado, en lo doméstico y en la construcción del tejido social y redistribución de las cargas de este trabajo como herramienta de mayor valor para la resistencia, existencia y arraigo de las comunidades en los territorios.
· Promoción de la participación de las mujeres en la construcción de propuesta para el cambio en los territorios, haciendo valer su palabra y recogiendo en los escenarios políticos sus consideraciones, saberes y apuestas.
· Recuperar desde y para las mujeres la decisión sobre sus cuerpos y vidas, rechazando la militarización de los territorios y negándonos como pueblo a entregar la soberanía sobre los cuerpos de las mujeres al servicio sexual y doméstico de las fuerzas militares.
· La construcción conjunta con otras expresiones del movimiento social de una agenda programática y de mandatos que impliquen al pueblo Colombiano y a la pacha mama ser soberanos sobre la tierra y el territorio de nuestro país.
Es por esto que nosotras, la Confluencia de mujeres participamos y construimos desde y para el Congreso de los Pueblos, tierra, territorios y soberanía, con el propósito de fortalecer la propuesta de construcción de un nuevo país para todas y todos. Porque sabemos que sin nosotras no es posible.
Bogotá, 29 de septiembre de 2011
